Al final, la vida va de
celebrar.
Apretar los dientes,
esforzarte y celebrar.
Caerte, levantarte y
celebrar.
Amar, perder y celebrar.
Soñar, llegar y celebrar.
Vivir, compartir y
celebrar.
Al final, si te saltas el
último paso, es como si hubieras vivido a medias.
Y al final de los finales,
es como si no hubieras entendido nada. Sin el cómo.